Razón


La razón es el método de conciencia a nivel conceptual: la forma en la que el hombre integra perceptos en conceptos y conclusiones válidas para descubrir la naturaleza de la realidad. La razón es exclusiva del hombre, y es distinta de la habilidad general de resolución de problemas encontrada en los animales porque opera en términos de conceptos y no sólo de perceptos, además de ser voluntaria. El hombre no nace con razón, sino más bien con la facultad de razonar: la habilidad de descubrir el método conocido como razonamiento. El énfasis en el método de la razón es particularmente importante en la epistemología objetivista.

La lógica es la disciplina que estudia el razonamiento. Ayn Rand define a la razón como “la facultad que identifica e integra el material provisto por los sentidos del hombre” y a la lógica como “el arte de la identificación no contradictoria.”

Ley de causalidad


La ley de causalidad es un corolario de la ley de identidad. Peikoff explica esto diciendo "Dado que las cosas son lo que son, dado que todo lo que existe posee una identidad específica, nada en realidad puede ocurrir sin causa alguna o al azar." *1

Ayn Rand explicó la ley de causalidad a través del discurso de su personaje John Galt:
"La ley de causalidad es la ley de identidad aplicada a la acción. Todas las acciones son causadas por entidades. La naturaleza de una acción es causada y determinada por la naturaleza de las entidades que actúan; una cosa no puede actuar en contradicción con su naturaleza (...) La Ley de Identidad no permite que comas tu torta y la tengas también. La ley de causalidad no permite que comas tu torta antes de que la tengas."*2


Fuentes de las citas:

*1 Leonard Peikoff “The Analytic-Synthetic Dichotomy,”
Introduction to Objectivist Epistemology, 147
*2 Galt's Speech, For the New Intellectual, 151

Ley de Identidad


La Ley de Identidad establece que un objeto es igual a sí mismo. Esto se suele expresar simbólicamente con la expresión 'A es A'.

En filosofía, esta ley con frecuencia es atribuida a Aristóteles, quien escribió:
"Ahora, 'por qué una cosa es ella misma' es una pregunta sin significado. Es preciso que el porqué de la cosa que se busca se manifieste realmente; es preciso, por ejemplo, que se haya visto que la Luna está sujeta a eclipses, pero el hecho de que una cosa sea ella misma es la única razón y la única causa a ser dada en respuesta a todas las preguntas tales como por qué el hombre es hombre, o el músico músico, a menos que uno respondiera 'porque cada cosa es inseparable de sí misma, y el hecho de que sea una significa exactamente esto', respuesta que se aplica igualmente a todas las preguntas de este género, y que las resuelve en pocas palabras."
-Aristóteles, Metafísica, libro VII, parte 17
La Ley de Identidad es muchas veces mencionada como una ley fundamental de la lógica.

Axioma de la Conciencia


El Axioma de la Conciencia establece que la conciencia existe. En particular, que cualquier afirmación referente a la realidad implica la existencia de una entidad conciente haciendo esa afirmación. Por ejemplo, la afirmación "El sol está brillando," implica la existencia de una entidad conciente que está aseverando que el sol está brillando, demostrando, en consecuencia, que la conciencia existe. Esta implicación permanece válida ya sea que la afirmación sea falsa o verdadera. En este caso, ya sea que el sol esté brillando o no.

Primacía de la Existencia


La Primacía de la Existencia es el primer axioma del Objetivismo: que la realidad es lo que es, más allá de la percepción o el deseo. La mente comprende el universo, no lo crea.

En otras palabras, la existencia tiene una primacía sobre la conciencia. Esta postura contrasta con la Primacía de la Conciencia.

La Primacía de la Existencia se resume en la frase de Francis Bacon: "La naturaleza, para ser comandada debe ser obedecida" y en la expresión "Desear no hará que se cumpla."

La lógica y su importancia


La lógica es la disciplina que estudia el razonamiento. El antiguo filósofo Aristóteles fue quien primero trató con ella. La palabra lógica proviene del vocablo griego 'logos', que significa 'razón' o 'pensamiento'.

Aristóteles definió al ser humano como un animal racional. Si nos guiamos por esta definición, llegamos a la conclusión de que la lógica es imprescindible para que el ser humano pueda vivir de acuerdo a su naturaleza.

Los componentes principales de todo proceso lógico son tres: las premisas, el razonamiento, también conocido como argumento lógico, y la conclusión. La lógica nos garantiza que, si utilizamos premisas verdaderas, mediante un razonamiento válido podemos llegar a conclusiones verdaderas.

Es imposible exagerar la importancia de sostener premisas verdaderas. De eso depende la validez de todas las conclusiones a las que un humano pueda llegar mediante razonamiento. Deberíamos tener esto en cuenta antes de decidir si vamos a creer o no en la existencia de un Dios: la elección incorrecta nos haría vivir cometiendo errores, por más que razonemos correctamente.

Un elemento importante de la lógica es el Silogismo. Se trata de un tipo especial de razonamiento en el que se infiere una conclusión a partir de dos premisas. Tanto las conclusiones como las premisas son tipos de proposiciones. Este concepto nos es útil para introducir un ejemplo simple de la aplicación de la lógica:

Premisa mayor: Todos los humanos son mortales.
Premisa menor: Sócrates es humano.
Conclusión: Sócrates es mortal.

Este es un ejemplo simple, y hasta puede parecer evidente para algunos, pero sería un grave error subestimar a la lógica: aseguro que al observar la lista completa de todos los silogismos correctos posibles muchos de ellos no son para nada evidentes, y sin embargo son totalmente válidos.

Sin un conocimiento riguroso de la lógica las personas pueden tener problemas para razonar. Esto no significa que estemos inhabilitados para razonar hasta que aprendamos lógica; significa que aprendiendo lógica podemos razonar más efectivamente, algo esencial para nuestra supervivencia como humanos.

Hay algunos filósofos que se niegan a razonar porque no simpatizan con la rama aristotélica de la filosofía (triste pero real). Incluso hay corrientes filosóficas enteras que niegan el razonamiento ya que niegan la existencia de la mente humana (ejemplo: el Materialismo, base del Comunismo y del Socialismo). Las consecuencias de tomar esta actitud son funestas para la vida del hombre: la Cuba comunista y la URSS son sólo dos ejemplos en los cuales los hombres vivieron como hormigas del totalitarismo como consecuencia de negar la existencia de la razón. Lamentablemente estas filosofías antirracionalistas, y en consecuencia antihumanas, todavía presentan cierta influencia en casi todos los países del mundo. En el caso de Cuba sigue vigente como forma de Gobierno.

También hay otra corriente filosófica, llamada Lógico-Positivismo, que niega la existencia de las verdades, afirmando que no existen las verdades absolutas. Una persona que no cree en la existencia de verdades absolutas está incapacitada para razonar, ya que las premisas necesitan ser verdades para que, mediante razonamiento, la conclusión sea verdad. Además, esta filosofía está violando un principio de la lógica, el de no contradicción: se afirma que es una verdad absoluta que no existen las verdades absolutas.

A pesar de estas tragedias filosóficas que todavía nos afectan, el futuro es prometedor. Si uno analiza la historia, la razón siempre terminó ganando. El redescubrimiento de unos pocos textos de Aristóteles bastó para romper con cientos de años de misticismo y ocultismo en los que la humanidad estuvo sumergida durante la Edad Media, triste situación de la que la que podría no haber logrado escapar.

La clave del éxito de la razón es que está sostenida en la realidad misma. Citando a Ayn Rand, gran pensadora aristotélica de nuestra época: "podemos evadir la realidad, pero no podemos evadir las consecuencias de evadir la realidad". Podemos elegir no razonar, pero no podemos evitar las consecuencias de esa elección.